Si te vas de campamento y no sabes aún qué carpa elegir, en esta nota te contamos todo lo que debes saber.

Cada vez más personas eligen los campamentos para disfrutar de unos reparadores días en el corazón mismo de la misteriosa naturaleza. En otros tiempos, la carpa y la mochila quedaban reservadas a los que no juntaban más que unos pocos pesos para pagar el pasaje de ida y vuelta.

Pero, a la hora de pensar en tu viaje y en tu aventura, suelen aparecer preguntas básicas como por ejemplo, ¿Qué carpa elegir? Si es tu caso, ¡entonces sigue leyendo!

Los distintos tipos

Existen diversos factores que te harán elegir un tipo de carpa en especial. En función del clima, la cantidad de personas y de cuánto tiempo se utilizará. Para decidir, es importante conocer los 4 tipos de carpas, disponibles para 4 personas o 6 personas.

Carpa Canadiense

Es la más tradicional y antigua en diseño. El techo a dos aguas es su principal característica, pero también su gran desventaja, porque el espacio interior se ve reducido en la altura. Generalmente se realizan utilizando materiales muy resistentes y son fuertes en su instalación.

Carpas Iglú

Este tipo de carpa hoy en día es la más utilizada y sustituyó a la canadiense por dos factores principales: materiales más livianos y por lo tanto más fáciles de transportar y mejor resistencia a los vientos por su forma, que recuerda a las construcciones de hielo de igual denominación.

Carpas Playeras

Son imprescindibles a la hora de ir a la playa y su armado es muy sencillo, ya que hay modelos que no poseen varillas. También se utilizan para guardar cosas.

Carpas estructurales

Están pensadas para estadías largas y para muchas personas. Algunas poseen ambientes divididos y cuentan con un buen espacio interior y techo alto.

Consejos para la instalación

Ahora que ya sabes qué carpa te conviene para tu campamento, lo ideal es que sepas cómo instalar la carpa.

Primero, ten en cuenta que la elección de ese lugar depende la comodidad, la seguridad, la vista panorámica, el aislamiento necesario y la defensa de los factores climáticos.

Segundo, debe instalarse el campamento sobre la base de tres elementos indispensables: agua, leña y espacio plano. El uso permanente que se da al agua, para beber, lavar o cocinar, obliga a la cercanía de la fuente que la provee: un arroyo, río o lago.

Una vez lograda el área de instalación de la carpa, es importante analizar la orientación del sol y el viento. Los pastizales altos suelen ser refugios de alimañas; una recorrida por los alrededores permitirá investigar la presencia de hormigueros y nidos de abejas o avispas o cualquier insecto.  Recuerda, por ejemplo, que un lugar con barro significa, casi con seguridad, mosquitos.

Ten en cuenta también que una lona impermeable o una tela plástica debajo de la carpa mantienen el piso seco. Los aleros o cobertizos delanteros contarán siempre con la inclinación suficiente para escurrir el agua: la carpa no debe tener plano alguno que posibilite la acumulación de agua. La limpieza interior se garantiza siempre entrando descalzo y no entrando a la carpa con ropa mojada.

¡Ahora sí! ¡Listos para emprender el viaje!

Recuerda que debes tener en cuenta tres detalles importantes:

• A dónde vas a ir: revisa el pronóstico del tiempo para ese destino y las condiciones del terreno.

• Con cuánta gente irás: en general, las salidas suelen ser de dos o tres personas, pero analiza tu caso en particular para saber si elegir una carpa para cuatro personas o una carpa para seis personas.

• Cuánta comodidad deseas: una vez fuera de la ciudad, la carpa se convierte en nuestro hogar, en nuestra zona de confort. Y, por eso, debes decidir cuánto estás dispuesto a soportar.

¡Ahora ya está todo listo para que disfrutes de tu campamento con tu carpa ideal!

Crédito fotográfico : Pixabay