Desde el 2017, todos los nuevos edificios comerciales y de administración pública de Francia deberán contar con aparcamientos de bicicletas.
A partir del próximo año, todos los edificios públicos y comerciales deberán contar con aparcamientos de bicicletas en sus puertas.
“Con el fin de animar a los desplazamientos en bicicleta, todo edificio nuevo, comercial (incluyendo los complejos de cines) industrial o de servicio público, debe proporcionar la infraestructura para el aparcamiento seguro de bicicletas”, establece el citado artículo.
Podría pensarse que se trata del clásico soporte situado a la puerta de los edificios, pero no es así. La norma específica que el estacionamiento para bicicletas habrá de ser “cubierto, cerrado y situado en la misma unidad de tierra del edificio”. Incluso va más lejos, dado que establece que las bicicletas deberán estar vigiladas por “una cámara o un agente”.
Con esta iniciativa, Francia da un paso más en su lucha para fomentar que más y más ciudadanos utilicen la bicicleta como medio de transporte habitual.
Fuente: ciclosfera